La Dehesa es un lugar privilegiado. Unas mil hectáreas sin vallar y libres de cables , coches, etc etc...Es un terreno controlado y vigilado, en el que se puede pasear a caballo siempre que respetes las normas y el entorno.
Allí empezamos a montar y allí comenzó nuestra vida con los caballos.
Los chicos, y mayores, estaban deseando conocerla, y allí nos fuimos todos...
Contaros que durante mucho tiempo ha sido escenario de muchísimas películas western, allí se han rodado grandes títulos. Ahora ya no queda nada de aquellos estudios; hubo un gran poblado , un fuerte y dos ranchos.
Es fantástico galopar por las praderas de " cercano-oeste", je je...
El paseo duró más de dos horas y hubo emociones para todos...esta vez no fue Teresa quien se cayó , ¡ no! sorprendente ¿verdad?
Fue Iván, pero no tuvo importancia, se bajó en marcha cuando Quikc dio un saltito inesperado, je je...
Todos lo pasamos estupendamente, incluso Merche que se atrevió con Apache, el pinto de la foto, que sigue estando muy bravo, como dicen los mexicanos.
Al final nos hicimos una foto; queríamos contarlo aquí y animar a todo el mundo a que se acerque a cualquier lugar donde haya caballos, los acaricie y los abrace.
Es una de las cosas más agradables que se puede hacer en esta vida.
Y montar , ¡claro! montar también es estupendo.
¡Menudas vistas !
La despedida de una preciosa tarde con caballos y amigos.
La despedida de una preciosa tarde con caballos y amigos.