El valle mantuvo los colores rojizos y naranjas durante mucho tiempo, y la nieve a tardado en llegar.
Ayer nevó, pero tampoco fue una gran nevada. Otros años en estas fechas ya hemos "vivido" siete u ocho nevadas grandes. Si miráis atrás podréis ver algunas fotos del valle cubierto por la nieve.
Para nosotros la nieve supone un montón de inconvenientes, pero no importa, es tal la belleza que toman las cosas y la sensación de que hay algo maravilloso y secreto cuando todo está blanco, que la esperamos cada año con verdadera ansiedad.
También el bosque y la montaña la esperan con ansiedad y con necesidad. El agua del verano depende en gran medida de estas nieves ,este año esquivas, pero generosas casi siempre. El pasto y los arroyos necesitan del agua que ella aporta y nosotros de su hermosura para ser más felices.